Al término de la edición del año pasado del BBK Live, en EKA/ACUV se recibieron quejas de asistentes que aseguraban no haber encontrado puntos de agua potable y haber visto carteles con la leyenda “Agua no potable” en algunos lavabos de los WC del recinto, viéndose obligados, con gran enfado, a comprar botellines de agua a un precio bastante elevado. Por razones que huelga explicar, la disponibilidad de agua potable en un evento que reúne a decenas de miles de personas es algo esencial y obligatorio.

Sin embargo, en los planos del recinto y de la zona de acampada que ofrece la página web del festival para la edición de este año (https://www.bilbaobbklive.com/) no figuran puntos de agua potable. En EKA/ACUV queremos entender que habrá agua potable en los lavabos de los WC, pero pensamos que, además, debería haber fuentes repartidas por todo el recinto del festival y de la acampada y que deberían estar perfectamente señalizadas, tanto in situ como en los planos. Más aún teniendo en cuenta que la organización prohibe la entrada de comida y bebida del exterior. Last Tour, el organizador del evento, alega, según se ha publicado en prensa, que dicha prohibición es “práctica habitual en este tipo de festivales”.

Es cierto. Pero no por eso deja de ser una práctica abusiva. En un informe de febrero de 2017 que responde a una pregunta de la Comunidad de Madrid respecto a la prohibición de introducir en los cines comida y bebida del exterior, la Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (AECOSAN) concluye lo siguiente: “Se considera que la práctica consistente en prohibir la introducción de comidas y bebidas adquiridas en el exterior de la sala de cine, estando permitido el consumo de esos mismos productos cuando son adquiridos en su interior, es ilegal y tiene carácter abusivo de conformidad con lo dispuesto en los artículos 82, 86.7 y 89.4 de la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios”. http://www.aecosan.msssi.gob.es/AECOSAN/docs/documentos/consumo/estudios/Informe_cine_comida_bebidas.pdf

El informe alude a las salas de cine, pero en EKA/ACUV entendemos que es perfectamente extrapolable a los conciertos y festivales como el BBK Live.

También generó polémica el año pasado en el BBK Live la imposibilidad de recuperar, al terminar el festival, cantidades inferiores a 2 euros sobrantes en las pulseras Cashless. La organización parece haber tomado nota y mejorado el sistema. Según explica su web, si la pulsera se ha cargado online se devolverá automáticamente e íntegramente el dinero sobrante a partir del 17 de julio. Si se ha cargado en los puestos de recarga, se podrá pedir en ellos la devolución, sin importe mínimo ni coste extra. Sí habrá, no obstante, un coste de 1 euro por transferencia si se solicita el reembolso del sobrante en el portal de devoluciones que el festival tendrá disponible del 18 al 26 de julio.