Durante años, millones de personas en todo el Estado pagaron más de lo que debían al comprar su coche nuevo. No fue casualidad: entre 2006 y 2013, más de una veintena de fabricantes y concesionarios intercambiaron información sensible para coordinar precios y reducir la competencia. Lo que parecía un mercado normal era, en realidad, un acuerdo ilegal que encareció artificialmente el precio final de los vehículos que estábamos comprando.
Hoy, esa práctica tiene nombre —el Cártel de Vehículos— y también tiene consecuencias: la justicia ha confirmado que fue una conducta abusiva y que las personas consumidoras afectadas tienen derecho a reclamar.
Por ello, desde EKA/ACUV consideramos que este es el momento adecuado para dar el paso y recuperar lo que sobrepagamos por nuestro coche.
¿Qué fue exactamente el Cártel de Vehículos?
Entre 2006 y 2013, varios fabricantes y redes de distribución compartieron información estratégica sobre precios, márgenes y políticas comerciales. Este intercambio les permitió alinearse en el mercado y evitar competir realmente entre sí. ¿El resultado? Los coches se vendieron más caros de lo que deberían, vulnerando directamente los derechos de las personas consumidoras.
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) sancionó estas prácticas y los tribunales han ido ratificando, sentencia tras sentencia, que existió un perjuicio claro para quienes adquirieron un vehículo en aquellos años.
El mensaje es claro: si pagaste de más, tienes derecho a recuperarlo.
Por qué es abusivo y qué dice la justicia
Los tribunales han dejado claro que este tipo de acuerdos suponen una infracción grave del derecho de la competencia. Que varias empresas se coordinen para encarecer un producto básico como un coche nuevo no solo perjudica a la economía en general: afecta de manera directa al bolsillo de cada persona compradora.
Las sentencias establecen que estas prácticas impidieron a las personas consumidoras acceder a precios reales de mercado, generando un sobrecoste que ahora puede reclamarse. Y aunque cada caso debe analizarse individualmente, la puerta para exigir una compensación económica está abierta de par en par.
¿Qué se puede reclamar?
Si compraste un coche nuevo entre 2006 y 2013 y pertenece a alguna de las marcas implicadas, puedes reclamar una indemnización por el sobreprecio pagado. El importe exacto depende de cada caso, pero distintos estudios periciales sitúan el perjuicio entre un 10% y un 15% del valor del vehículo, incluso más en algunos supuestos.
Además, ni tan siquiera es necesario conservar la factura: existen vías para obtener la documentación del vehículo siempre que lo hayas comprado en un concesionario oficial. Y algo muy importante: aunque hayas vendido el coche y ya no seas su propietario, sigues teniendo derecho a reclamar, porque el perjuicio económico lo sufriste tú en el momento de la compra.
Pero tampoco te compliques, desde EKA/ACUV realizamos un análisis personalizado para determinar si tu coche entra dentro del periodo afectado y cuál sería el importe aproximado a reclamar.
Un momento clave para reclamar
Durante años, muchas personas dieron este tema por perdido. Hoy, la situación es justo la contraria: las resoluciones judiciales recientes han consolidado un camino claro y favorable para quienes decidan iniciar su reclamación. Cada vez más juzgados están reconociendo indemnizaciones, lo que confirma que estamos en un punto decisivo.
Por eso, desde EKA/ACUV queremos animar a todas las personas afectadas a revisar su caso cuanto antes. No solo porque existe la oportunidad real de recuperar dinero, sino porque es importante seguir marcando límites frente a prácticas que vulneran los derechos de las personas consumidoras.
