Cláusula de gastos compartidos en tu hipoteca: ¿equitativa o abusiva?

Cláusula de gastos compartidos en tu hipoteca: ¿equitativa o abusiva?

Ahora que los gastos hipotecarios están en boca de todo el mundo y continúan generando un aluvión de reclamaciones a las diferentes entidades financieras, queremos detenernos un momento para hablar sobre la llamada cláusula de gastos compartidos. Una cláusula a la que se agarran desde los bancos y que, aparentemente, está diseñada para distribuir equitativamente los costos entre ambas partes. ¿Pero es verdaderamente justa esta distribución? A continuación, profundizaremos en este tema y te daremos las respuestas que necesitas.

¿Qué son los gastos compartidos en una hipoteca?

La cláusula de gastos compartidos es una disposición que se incluye en algunos contratos hipotecarios, donde se establece un reparto de los gastos derivados de la formalización del préstamo entre el banco y el cliente. En teoría, esta cláusula pretende distribuir equitativamente los costos entre ambas partes.

¿Son realmente equitativos estos repartos?

Aunque en principio la idea de una distribución equitativa parece justa, en la práctica muchas de estas cláusulas son muy cuestionables. En muchos casos, estas disposiciones cargan a la persona consumidora con la mayoría de los gastos, mientras que las entidades financieras asumen una parte mínima. Esto lleva a una situación desequilibrada donde el cliente termina pagando mucho más de lo que correspondería en un reparto justo.

¿Son válidas estas cláusulas?

Aquí es donde surge la controversia. Algunos bancos argumentan que estas cláusulas son válidas y que el cliente debe cumplirlas, incluso aunque se asumiese que son desequilibradas. Sin embargo, es importante destacar que la validez de estas cláusulas está sujeta a interpretación legal.

¿Qué dice la ley al respecto?

La legislación y la jurisprudencia han establecido que, para que una cláusula de gastos compartidos sea válida, debe cumplir con el principio de equidad. Esto significa que el reparto de los gastos debe ser justo y proporcional a los beneficios obtenidos por cada parte. Si el reparto es desequilibrado y coloca una carga excesiva sobre la persona consumidora, la cláusula podría considerarse abusiva y, por lo tanto, nula.

¿Qué hacer si tienes una cláusula de gastos compartidos desequilibrada?

Si este es tu caso, y efectivamente has firmado un préstamo hipotecario con una cláusula de gastos compartidos que consideras injusta, tienes derecho a reclamar su nulidad. ¡Que no te frene esta cláusula!

Para ello, es recomendable buscar asesoramiento legal especializado y presentar una reclamación formal ante tu entidad financiera. Recuerda que, desde EKA/ACUV, tenemos un gabinete jurídico a tu disposición especializado en estos casos que puede ayudarte en el proceso. Estaremos encantados de acompañarte en tu reclamación.

¡Infórmate, conoce tus derechos como persona consumidora y reclama lo que legítimamente te corresponde!

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